Año tras año, se repite la misma pauta por estas fechas, no creo que haya en Europa ninguna especie alada con un paso tan pronunciado y llamativo, algo similar pasa con el Ánsar común pero este ultimo quizá más prolongado en el tiempo, aunque, eso sí, igualmente de ruidosos y vocingleros.
Unos días, a lo sumo alguna semana, y todo quedara vacio de grullas hasta el próximo otoño. Como todas las invernadas con sus claroscuros, aunque la pauta más importante quedo marcada por la extremada sequia en todo el periodo, unos campos agostados prematuramente y como remate final, una prolongada ola de frío siberiano, para “achicharrar” definitivamente siembras y pastizales.
Pocos días antes, pasando por el territorio de “Picoroto”, nombre que espontanea y acertadamente le puso uno de mis acompañantes nada más comprobar la deformidad en su pico, volví a verla. Como en las ocasiones anteriores se encontraba alrededor de la misma encina, comiendo sobre todo brotes de cereal, obviamente las ricas bellotas ya estarían agotadas tras una estancia tan prolongada; el grupo estaba compuesto por los seis ejemplares adultos (supongo que los mismos) que a lo largo de todas las visitas visualizamos. “Picoroto” siempre acompañada de su pareja, y no muy lejos de las otras cuatro.
Al parar el coche, y como suele ser habitual, comenzaron a alejarse, elegantemente, dándonos la espalda, la más rezagada y remolona de ellas era precisamente “Picoroto”, que en un último gesto, antes de marcharnos se giro hacia nosotros, permaneciendo un buen rato en esa postura, momento que aproveche para fotografiarla, aquel gesto entrañaba para mí una despedida, pues su mágico viaje de ida estaba a la vuelta de la esquina.
Ojala que cuando vuelvan las grullas, encuentren un paisaje verde y acogedor, ojala que con una buena cosecha de bellotas y abundantes rastrojos de cereal, ojala el paraíso que siempre significo Extremadura para ellas perdure. ¡¡¡Buen viaje amigas!!!.
Ya se van, ayer vi yo en Madrid sobre las 17 horas un grupo de más de 100 dirección noreste ¡qué pena!
ResponderEliminarEs cierto que debe llover, nuestros campos se secan y el riesgo de incendios forestales se multiplica.
Espero que en otoño disfruteis de nuevo de picoroto.
Manuel, como siempre tus post son una pasada.
Un abrazo!!
Muchas gracias Manolo por traernos estas noticias a partes iguales alegres y nostálgicas, Picoroto es una heroina en toda regla. Ojala que tus deseos de feracidad para la próxima llegada se hagan realidad, será bueno para ellas y para nosotros.
ResponderEliminarDe todos modos y como en años anteriores, yo te rogaría que durante esta larguisima espera, hagas alguna nueva entrada contando algún fleco que se te quedó en la memoria sobre ellas o sobre algún compañero de cielo.
Saludos muy cordiales.
...traigo
ResponderEliminarsangre
de
la
tarde
herida
en
la
mano
y
una
vela
de
mi
corazón
para
invitarte
y
darte
este
alma
que
viene
para
compartir
contigo
tu
bello
blog
con
un
ramillete
de
oro
y
claveles
dentro...
desde mis
HORAS ROTAS
Y AULA DE PAZ
COMPARTIENDO ILUSION
MANOLO
CON saludos de la luna al
reflejarse en el mar de la
poesía...
ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE TITANIC SIÉNTEME DE CRIADAS Y SEÑORAS, FLOR DE PASCUA ENEMIGOS PUBLICOS HÁLITO DESAYUNO CON DIAMANTES TIFÓN PULP FICTION, ESTALLIDO MAMMA MIA, TOQUE DE CANELA, STAR WARS,
José
Ramón...
Saludos José Ramón, bienvenidos tu y tus poesías....y muchas gracias a los amig@s Paloma y Ramón por sus comentarios siempre tan gratificantes; también espero impaciente el desenlace de la historia con picoroto, aunque me late que volverá...
ResponderEliminar